Visión de los indígenas sobre los frailes españoles

Los indígenas de la Nueva España veían a los frailes Franciscanos (los primeros 12 en llegar) como un grupo marginado por los demás españoles que llevaban armaduras y tomaron los terrenos para ser los encomenderos.

Veían que estaban solos y rezaban, que trataban de impartir su religión y por lástima hacia los frailes, los españoles los veían de una manera muy dócil.

Los españoles eran vistos como personas buenas pero diferentes a los demás españoles, siendo inofensivos hasta que empezaron a abusar de ellos en temas de azotamiento y de explotación de trabajo en la construcción de los conventos y templos.